Enrique García de Movellán López, más conocido en el mundo del tenis como "kiriki", lo dio todo por su pasión, el deporte de la raqueta. Como jugador y como directivo. Descubra sus logros como tenista y su labor como directivo, apostando por el tenis base y organizando grandes eventos en Granada. Siga leyendo más abajo.
Enrique García de Movellán López, conocido en el mundo del tenis como “kiriki”, nació en Cádiz en 1930, un 25 de diciembre. Tras pasar un tiempo en Madrid estudiando Derecho, llegó a Granada para terminar sus estudios. Ciudad de la que nunca se iría y a la que tanto daría años después a través del tenis, su pasión. Corría el año 1964 cuando este joven abogado se alzaba con su primer campeonato absoluto de Granada, rompiendo el dominio ejercido hasta entonces por Pepe Ferrer. Ocho títulos más sumaría Kiriki como campeón absoluto individual de Granada. En Cádiz se proclamó campeón absoluto diez años. Fue segunda categoría nacional. En la modalidad de dobles cosechó importantes triunfos, como el campeonato absoluto andaluz dobles masculino y mixto. Representó a España jugando en Alemania, Portugal y la India.
Cumplir años no fue un obstáculo para que Kiriki siguiese sumando títulos, ya en categoría veteranos. Así, fue campeón de veteranos de dobles de Andalucía en 1977. En 1979 sumó otro título de dobles veteranos de Andalucía formando pareja con Manolo Garrido, en un emocionante partido en el que terminaron imponiéndose por 6-3, 4-6 y 8-6 ante la pareja Alonso-Romero. Compañero Manolo con quien perdería la final ese mismo año en categoría individual en otro disputado partido por 4-6, 6-3 y 6-3. En el campeonato de Granada modalidad veteranos también cosechó triunfos y subcampeonatos en esos años. Actividad en las pistas que ya compaginaba con su cargo de delegado de la Delegación Granadina de Tenis, puesto que ocupó durante casi tres décadas. A la par, ayudaba a la Federación Andaluza de Tenis en otros puestos. En 1981 era vocal de la Junta Directiva de la Federación Andaluza de Tenis, miembro de la Comisión Permanente y de la Comisión de Disciplina Deportiva y llevaba junto a otro letrado más la Asesoría Jurídica de la Federación. Desde 1996 hasta el año 2000 fue vicepresidente de dicha Federación. Como directivo apoyó siempre el tenis base. Sin tenis base no habría tenis de calidad. Si años atrás disfrutaba como un niño recibiendo los trofeos que conquistaba en la pista, ahora disfrutaría por igual entregando a otros jugadores los trofeos. Apoyó a todos los clubs de tenis en todo lo que pudo, dando todas las facilidades del mundo para que éstos organizasen torneos federados, aquellos que otorgan puntos en las distintas clasificaciones. Si había que ir a Almería, Sevilla o Málaga, acompañando a un grupo de niños para que pudiesen jugar un torneo importante, allí estaba él. La propia Federación Española le encargó más de una vez ojear jugadores infantiles en busca de futuras promesas. Esta lucha por el tenis base no hizo que dejase de lado el tenis profesional. De esta forma consiguió traer a Granada el campeonato absoluto de España. Corría el año 1985. El tenis experimentaba otro auge en España por la actuación destacada de Emilio Sánchez Vicario, en individual, y en dobles junto a Sergio Casal. Ambos disputaron la final de dicho torneo, jugado en las pistas de la Real Sociedad de Tenis de Granada, venciendo Emilio. Torneo del que fue director. Una entonces jovencísima Arancha Sánchez Vicario despuntaría en dicho torneo, para sorpresa de muchos, proclamándose campeona absoluta de España con apenas 14 años. Campeonato absoluto de España que vendría de su mano a Granada otra vez en el año 2000, disputándose en las pistas de la Real Sociedad Tiro de Pichón. Un mes antes de su celebración la sede donde debía jugarse se retiró, y Kiriki se ofreció a la Federación Española a buscarle sede y a organizar el torneo cuando apenas había tiempo para ello. Un acto que la Federación Española agradeció mucho. Y es que ése es el carácter que definió a Enrique, tanto como tenista como directivo: la lucha por el tenis. Fue miembro de honor del Internacional Lawn Tenis Club de España y del Internacional Lawn Tenis Club de la India. Tal fue su entrega al tenis que además durante muchos años ejerció como profesor. Fue Director de la Escuela de la Real Sociedad de Tenis. Por multitud de lugares diferentes (Granada, Armilla, Salobreña, Almuñecar, etc..) enseñó a muchísimos jóvenes no sólo a jugar al tenis, sino que además trató de inculcarles los valores propios de un deporte que lo hacen especial. Conocido en toda la España tenística. Amigo de Santana, quien siendo un niño coincidía con Kiriki en Madrid, y cuando no muchos querían jugar con aquel niño de orígenes humildes, Kiriki siempre jugó con aquel chaval que años después deslumbraría al mundo con su juego de muñeca. Trucos que enseñaría a Kiriki. Año tras año se veían en las finales de las Copas Davis ganadas por España. Al igual que con Orantes, otro tenista de ensueño. Una gran amistad les unía a los. Andrés Gimeno, el padre de Alex Corretja, de Sergio Bruguera, los Sánchez Vicario... todos tenían una gran amistad con Kiriki. La distancia no importaba. Cada eliminatoria disputada en España de la Copa Davis se convertía en el punto de encuentro. Y cómo no, se hablaba de tenis. Grandes conversaciones. Quizás por eso Kiriki ejerció de cronista de la Copa Davis en varias ocasiones para el periódico Granada Hoy. No en vano Kiriki había ejercido como redactor en el Diario de Cádiz y en el Patria de Granada. Así era Enrique, polifacético. Estudió bachillerato en el Colegio San Felipe Neri en Cádiz. Tras terminar la carrera de Derecho en Granada, fue profesor ayudante en Derecho Administrativo y Derecho del Trabajo y ejerció como abogado. Y como decían sus amigos, “eterno secretario”. No en vano fue Secretario de la Hermandad de Gloria del Rocío, de la Asociación Granada Tradicional, de la de mayores vecinales de Granada, de la Hermandad de las Penas, de los Amigos de la Bobadilla, del Consejo de Administración del Al-Club de Almuñecar, y finalmente, de la Hermandad de Gloria de Nuestra Señora de los Ángeles. Kiriki falleció un 27 de febrero de 2015. Se fue en paz. Días antes había estado jugando su partido de tenis semanal y portando un Cristo. Acababa de pasar unos días de retiro espiritual.
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AutorPablo García de Movellán ArchivosCategorías |